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Seguridad en Transporte: El Estratega que Todos Llevamos Dentro

Seguramente la preocupación de la inseguridad en las carreteras de México es un factor que no deja dormir a muchos empresarios, sobre todo a los líderes de la seguridad.

Por ende, el robo en las carreteras por los grupos delictivos se ha convertido en un verdadero “campo de batalla” que se debe ganar a cambio del bienestar patrimonial de las organizaciones.

Por esto, la obra de “El Arte de la Guerra” de Sun-Tzu nos abre un panorama con una “perspectiva estratégica” para ganar con éxito la batalla de la seguridad en la cadena de suministro.

Por otro lado, el ajedrez es un ejemplo de cómo debemos defender nuestro principal objetivo haciendo uso de herramientas representadas con las piezas de menor rango que el rey.

A continuación daremos los siguientes puntos tomados con base en la propia experiencia como “estratega” de la seguridad en la cadena de suministro.

PLANEACIÓN Y EJECUCIÓN DEL ESTRATEGA

Conoce a tu enemigo y conócete a ti mismo y en cien batallas saldrás siempre ganador. Conocerse a sí mismo es saber dónde estamos parados, si nuestro producto es de alto riesgo, ¿cuál es nuestro nivel de riesgo?, si tenemos capacidad de reacción ante una eventualidad, ¿existen protocolos de reacción bien coordinados?; ¿los operadores, custodios, monitoristas, etc., están bien adiestrados para seguir el protocolo de emergencia?, ¿los sistemas tecnologicos en el transporte son funcionales?, ¿hemos hecho alianzas con autoridades?, ¿los líderes cuentan con la templanza e inteligencia necesaria para la planeación y toma de decisiones eficaces?, entre otras.

Conoce al enemigo. ¿Sabes si habrá informantes dentro de la empresa?, en el exterior, ¿cuántos delincuentes operan en contra nuestra?, ¿el miedo a un custodio armado les hará desistir?, ¿cómo pensará el jefe intelectual de la banda delictiva?, ¿qué papel juega cada integrante antes y durante al robo?, ¿qué días y horarios son los de mayor siniestralidad?, ¿cuáles son sus rutas más atacadas?, ¿qué mercancías son las más afectadas? y ¿qué tan profesional podría ser?

Por otro lado, conocer previamente el campo de batalla nos dará una ventaja, esto consiste en identificar bien las carreteras con el análisis de riesgo.

La información se nutre de las personas que han transitado estos lugares y de otras fuentes de información.

Que tus planes sean tan oscuros como la noche. No reveles jamás las estrategias que aplicarás. Sé hermético, sutil, misterioso. Tus decisiones deben ser tan secretas, que ni tus más leales capitanes deben saber, sino a la hora apropiada. La confidencialidad es importante. Todos los miembros del equipo tienen prohibido dar información sobre el nivel de seguridad que darás al transporte.

EL ESPÍA

Es necesario contar con informantes que te den datos de posibles sospechas.

Para nuestro tema lo aplicaremos internamente. Todo trabajador involucrado en la cadena de suministro desde el que surte, el que despacha, el proveedor, entre otros, cuentan con información de tu producto, el cual pueden divulgar a fuentes externas perjudiciales para la compañía, por lo que al haber tanta gente involucrada debemos filtrar cualquier fuga de información.

Externamente los proveedores de transportes y seguridad te pueden dar información de recientes modus operandi.

La inteligencia será mucho mejor que la fuerza. A pesar de que la inseguridad pueda rebasar a la autoridad y el panorama no parezca mejorar, sí podemos ser más inteligentes que nuestros adversarios. Cambiando planes de última hora, custodios, operadores, proveedores, cualquier cosa que elimine información previa de “nuestra jugada”.

Un pequeño joven puede vencer a un enorme gigante con astucia y decisión. Si las órdenes no son claras, la culpa es del general. Tus instrucciones deben ser muy claras hacia tus subordinados, de tal manera que cada objetivo se logre puntualmente hasta cumplir con la meta. Los proveedores también participan y deben tener claro que la seguridad es tuya y se deben de disciplinar bajo tus estrategias, pero si una instrucción no es bien entendida se elevará el riesgo del transporte.

EL ENGAÑO

El fin es engañar a tu adversario. Aquí todo se vale. Debemos planear cómo ocultar lo que transportas. Claro que se puede dar falsa información. En el trayecto tus hombres pueden “simular” pertenecer a una institución distinta y de menor rango ante cualquier radar que los intercepte.

Trate a sus hombres como si fueran sus propios hijos, y sin duda le seguirán hasta el final. Otro factor fundamental es tu ejército: tus colaboradores. Desde el administrativo, como el supervisor, el jefe, el guardia, el custodio, todos, sin excepción deben sentirse propios a tu organización. Condecora a los mejores. Napoleón sabía este concepto y lo tomaba en serio. No olvidemos sus necesidades físicas y emocionales. Observar que estén con las provisiones necesarias para su trayecto, que tengan el descanso necesario. La comunicación directa les dará la sensación de que estás con ellos. Constantemente se deben retroalimentar con las palabras de nuestra voz. ¡Motívelos!

Concluimos que de forma concreta tenemos una batalla todos los días, la cual es contra un adversario de quien sabemos muy poco, sin embargo, todos contamos con una materia prima que se llama “inteligencia”. Arma principal contra la delincuencia. Fortaleza única contra los ataques del enemigo. Artillería intangible con grandes beneficios a mediano y largo plazo. Las batallas del día a día sólo se ganan con la mente más que con la fuerza. Sun-Tzu dijo: “El general que escuche estos consejos, seguramente ganará, pero el que no los escuche, luchará en la oscuridad”. Desarrollemos al estratega que todos llevamos dentro y ganemos la victoria. México y las empresas lo necesitan.