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RECORDANDO EL INCENDIO DE LA BOATE KISS EN SU DÉCIMO ANIVERSARIO

La letalidad del HCN se evidencia en los ocupantes que perdieron la vida haciendo fila para salir

El pasado 27 de enero se cumplió el décimo aniversario del incendio de la Boate Kiss, el incendio más mortífero de los últimos 60 años en Brasil y el tercero más mortífero en un club nocturno del mundo. Mi informe original sobre el incendio, publicado en las revistas de la NFPA y preparado después de visitar el lugar del incidente, días después del incendio, lo he actualizado para la NFPA, y una traducción al español de este artículo se puede ver aquí1. 
También tuve la oportunidad de ser invitado a una conferencia sobre este terrible evento, presentación que se puede ver aquí2. Al recordar este incendio, debemos reconocer que tragedias como esta resaltan cómo los códigos de incendios inadecuados en muchos países de Latinoamérica no pueden evitar que incendios como este vuelvan a ocurrir.
El incendio de la discoteca Kiss, o Boate, como se llaman los clubes nocturnos en portugués, ocurrió en Santa María, en el estado de Rio Grande do Sul, una ciudad universitaria en la parte sur de Brasil. La Boate estaba abarrotada, llena de estudiantes universitarios, y sólo tenía una salida de emergencia en funcionamiento. El extintor de incendios que se usó inicialmente, justo después de que una bengala pirotécnica incendiara poliuretano expandido, no funcionó. Aunque muchos ocupantes vieron de primera mano el incendio en desarrollo y se desplazaron inmediatamente hacia la puerta principal, fueron retenidos allí por guardias de seguridad, retrasando su salida. Cientos de ocupantes en otras partes del club nocturno no se dieron cuenta del incendio hasta que fue demasiado tarde.
El incendio de la Boate Kiss fue casi idéntico no sólo al incendio en el club nocturno Cromañón, ocurrido en Buenos Aires en el 2004, donde perdieron la vida 194 personas, sino también al incendio en el club nocturno The Station en Rhode Island, Estados Unidos, donde murieron 100 personas en 2003. El incendio de The Station ocurrió en un edificio que era aproximadamente un 20% más pequeño que la Boate Kiss. La importancia del incendio de The Station no es sólo su similitud con el incendio de Santa María, sino que fue un incendio ampliamente documentado y estudiado, lo que nos ayuda a comprender mejor lo que pudo haber sucedido en la Boate Kiss.
Los incendios de The Station y Boate Kiss incluían poliuretano expandido alrededor del escenario, y en ambos casos la banda musical estaba utilizando pirotecnia. Ambos edificios eran estructuras de un solo piso, sin la protección de rociadores automáticos. Además, en ambos casos, la pista de baile adyacente a donde tocaban las bandas se llenó de humo en menos de dos minutos después de la ignición del poliuretano.
El poliuretano expandido, bajo pirólisis, libera ácido cianhídrico (HCN) que es extremadamente letal. Los estudios forenses encontraron que HCN fue la principal causa de muerte de las víctimas del incendio de la Boate Kiss.

EL CÓDIGO DE INCENDIOS EN SANTA MARÍA 

Las deficiencias del código local dejaron a los revisores de planos e inspectores de incendios sin ninguna de las herramientas que hubieran podido modificar las puertas de salida, eliminar la espuma de poliuretano o requerir la instalación de rociadores automáticos. Lo que se ha establecido de manera inequívoca es que la Boate sólo tenía una salida en funcionamiento y que tenía sobrecupo; que no tenía rociadores automáticos; y que la espuma de poliuretano utilizada para atenuar el sonido no tenía retardantes al fuego y fue incendiada por pirotecnia. 
Excepto por el sobrecupo, ninguna de estas condiciones, aunque son contrarias a lo que indican los códigos y normas modernas, habrían sido violaciones válidas en Santa María porque las regulaciones locales no las exigían. En otras palabras, en mi opinión, es injusto responsabilizar a los encargados de hacer cumplir el código municipal, porque sin los requisitos necesarios de seguridad contra incendios establecidos en los códigos locales, estos funcionarios simplemente no tenían las herramientas para cambiar estas condiciones peligrosas.
Desde el incendio ha habido una buena cantidad de actualizaciones a los códigos de incendios en Brasil. Quizás una de las mejoras más importantes, hasta la fecha, es que hay más estandarización entre jurisdicciones. Brasil, desde el punto de vista de su legislación, es muy similar a los Estados Unidos, donde cada estado es libre de adoptar sus propios códigos de construcción y contra incendios. Se han adoptado nuevos requisitos sobre los acabados combustibles interiores y se ha restringido el uso de pirotecnia en los clubes nocturnos. Sin embargo, siguen existiendo problemas con las inspecciones de incendios y requisitos limitados para la protección de edificios con rociadores.

LITIGIO POR EL INCENDIO

El 28 de enero de 2013, los dos propietarios del club nocturno, Elissandro Spohr y Mauro Hoffmann, y dos de los miembros de la banda, Luciano Bonilha, el productor de la banda que encendió remotamente la bengala pirotécnica, y Marcelo de Santos, el cantante de la banda que sostenía la bengala en su mano, fueron encarcelados y luego liberados. El 22 de marzo de 2013, la Policía Civil de Rio Grande do Sul entregó su informe e implicó penalmente a 16 personas en esta tragedia, incluidos estos cuatro detenidos.
La computadora que grabó las imágenes de las cámaras de seguridad desapareció horas después del incendio y no ha sido encontrada. Los videos de esas cámaras podrían haber aclarado cuánto tiempo los responsables de la seguridad de las puertas de salida retuvieron a los ocupantes, después de que se declaró el incendio.
Después de años de litigio, en diciembre de 2021, un juicio con jurado condenó a los señores Spohr y Hoffman, los propietarios de Boate Kiss, y ellos fueron sentenciados a 22 y 19 años respectivamente. Los señores Santos y Bonilha también fueron condenados y sentenciados a 18 años cada uno. Sin embargo, las condenas resultantes de este juicio fueron anuladas en agosto de 2022 debido a un procedimiento ilegal durante la selección del jurado. En este momento, nadie ha sido responsabilizado por esta tragedia.

SERIE DE NETFLIX 

El 27 de enero de 2023, Netflix lanzó en todo el mundo una serie limitada titulada “Todos los Días la Misma Noche”3. Esta serie incluye cinco episodios que relatan esta tragedia y rinden homenaje a las 242 personas que murieron durante el incendio. Es una adaptación de un libro titulado “Todo Dia a Misma Noite”, escrito por Daniela Arbex, una galardonada periodista de investigación en su Brasil natal.
Al igual que otras series de Netflix basadas en hechos reales, es difícil discernir qué era real y qué no. La serie es a la vez un drama convincente, pero al mismo tiempo decepcionante. El drama de las familias a raíz de la tragedia es desgarrador y bastante apasionante. Como padre, ver la pérdida sin sentido de la vida de los hijos e hijas en edad universitaria te afecta hasta la médula. Sin embargo, la producción de las escenas del incendio fue confusa, especialmente durante la evacuación inicial. La respuesta del departamento de bomberos mostró personal sin protección autónoma, lo cual dudo que fuera el caso.
La discusión de los aspectos técnicos del incendio, como el cumplimiento del código, la instalación de espuma de poliuretano y la pirotecnia fue, en mi opinión, tendenciosa. Como ya mencioné, el código local de incendios en el momento del incendio no era claro. Tal vez, la parte más sorprendente para mí es cuando el investigador de la policía dice: “¡Es increíble que estas tragedias no ocurran más a menudo!”. Me sorprende esta declaración, tanto porque refleja un sentimiento que a menudo siento cuando los burócratas y los desarrolladores de edificios descartan mejores códigos de incendios y aceptan el statu quo, y porque estas tragedias ocurren con mucha más frecuencia de lo que deberían.

REFLEXIONES FINALES 

Este incendio es uno más de una serie de grandes incendios que han afectado a América Latina en los últimos años. Los incendios en América Latina representan cinco de los diez incendios estructurales con pérdida de vidas más grandes desde el año 2000, en todo el mundo. Parte del problema es el rápido desarrollo de nuestra región, apresurándose a reflejar la arquitectura del mundo desarrollado sin tener los códigos de seguridad contra incendios que evitarían la construcción de edificios que se convierten en trampas de incendio.

Aunque el problema se está abordando en algunos países, como Costa Rica, Colombia, Ecuador, Panamá y la República Dominicana, países que ya han mejorado sus códigos de incendios, este problema no se resolverá hasta que todos los países actualicen sus códigos de seguridad contra incendios. Aquí es donde los códigos y normas del IBC o la NFPA podrían sernos más útiles. Aunque estos códigos y estándares fueron desarrollados en los Estados Unidos, su claridad, sentido común y extracción técnica los hacen útiles en cualquier país. 
Hay personas que dicen que son muy “americanos”, pero este argumento, en mi opinión, pierde validez porque los incendios no saben de fronteras geográficas, de cultura, de idiomas o de nacionalismos. Los incendios obedecen a la física y la química, que es la misma en todos los países del mundo. Adaptar los códigos y normas como los del IBC o la NFPA a nuestra realidad, desde mi punto de vista, es la forma más rápida y efectiva de abordar nuestro problema de protección contra incendios.

Referencias:
1 https://articuloscontraincendio.org/artcls-incendios-devas#b9825bfd-7fac-495b-981e-84d841de9f31
2 https://youtu.be/lboBGAL7i6A 
3 https://www.netflix.com/title/81218409