Seguridad en América | Post

El diez de mayo es un día para reconocer y celebrar el amor que una madre brinda a su familia, el esfuerzo y dedicación de cada una, y en la seguridad existe una mujer que además de ser una impecable profesionista, es una madre justa y entregada

Nueve meses en el vientre y toda una vida juntos, así es como una madre se visualiza con sus hijos e hijas, siempre buscando las mejores oportunidades de vida, los cuidados y la preservación de la buena salud, y hay quienes además deciden continuar en el camino profesional, una de estas mujeres es Brisa Espinosa Ávila, quien, junto con su esposo, Miguel Ángel Champo Del Valle, ambos miembros del Consejo Directivo de Multiproseg, recibieron con orgullo en la empresa al actual director general, su hijo, Miguel Ángel Champo Espinosa.

“Mi madre me tuvo a sus 23 años, fue una madre muy joven, cuando llegué, ella seguía estudiando y la recuerdo siempre cuidándome, estudiando y trabajando. El aprendizaje que encuentro en ella, es la responsabilidad y la fuerza de voluntad para poder lograr todos tus objetivos no importan las circunstancias, siempre hay una forma de lograrlo. Mi madre es una mujer inteligente, justa y amorosa”, comentó Miguel Ángel Champo Espinosa.

Con todo y la escuela y el trabajo, Brisa Espinosa nunca dejó de lado uno de los deseos para su hijo, el que fuese y siga siendo feliz. “Ser mamá joven fue complicado, tenía tareas pendientes que resolver como persona y que tuve que compaginar, y muchas veces malabarear con todas las responsabilidades en mis hombros, jamás lo hubiera logrado si no fuera por el apoyo de mi esposo y mi madre. Luego en la crianza, ser consciente de repente, que esa persona va a estar observando, absorbiendo y siendo lo que le des. Creo que el reto principal siempre será formar un ser humano feliz y responsable de sus actos”, compartió.

El ser madre incentiva a tu cerebro a desarrollar más habilidades, a anticiparse a las caídas, a prevenir los moretones, reaccionar con rapidez, actuar en las enfermedades y estar siempre alerta a las necesidades de tus hijos, a su ambiente, su desarrollo; todas esas habilidades son similares a las que requiere la seguridad, y Brisa Espinosa estaba segura de que podía con todo esto, gracias al apoyo de su familia y sobre todo al amor y conexión que tiene con su hijo.

“Siempre vi a mi madre trabajar, me recogían del colegio y me llevaban a su oficina donde veía a una mujer encantada por su trabajo y mucho amor por la empresa en la que en ese tiempo o laboraba, después nos trasladábamos a casa y no paraban sus tareas, se preocupaba por tener siempre comida lista, ayudarme con el colegio. Recuerdo muy bien cuando nos poníamos a estudiar para los exámenes, teníamos un pizarrón en el formulábamos las guías para tener un método más rápido de retener información”, comentó Miguel Ángel Champo Espinosa.

Para Brisa, la maternidad es el proceso más sublime, amoroso e inacabable que existe. “Es la responsabilidad más grande, pero a la vez la más hermosa. Además, es un regalo lleno de sorpresas diarias que te reta a seguir y a ser mejor persona. Te enfrentas a muchos retos, pero principalmente, cuidar la salud de ambos, luego de eso, ser responsable al cien de una nueva vida que depende sólo de ti. Y además combinarlo con la vida profesional, lo cual pude lograr con mucha ayuda de mi esposo y nuestras familias, y siempre priorizando, nunca va a haber nada más importante que el bienestar de mi familia, luego de que pones en orden tus prioridades, sabes dónde acomodar tus roles y tienes un mapa a seguir, no es fácil y hay desvíos, pero nunca me rindo”, señaló la especialista.

MATERNIDAD SEGURA

La seguridad es una necesidad, una práctica diaria y una cultura; para quienes se desarrollan en este sector, forma además parte de la educación con la que crían a sus hijos, pues una vez que se conoce, se aprende y se viven diferentes situaciones que pueden poner en peligro la integridad de una persona, se aplican en todos los aspectos de la vida de los especialistas en seguridad, se vuelve algo inevitable.

“El desarrollarme en el sector de la Seguridad, interfiere mucho en la crianza de nuestro hijo, somos muy conscientes de los riesgos y eso te hace un poco paranoico y seguramente mi hijo lo sufrió y sigue sufriendo; hoy asisto a los congresos, a diversos lugares y siempre pienso, ‘Dios mío, ¿qué hicimos mal para dejar este mundo tan complejo a nuestros hijos?’”.

Es complicado saber todos los riesgos a los que una persona puede estar expuesta, sobre todo si es alguien a quien amas y a quien deseas siempre esté lejos del peligro, sin embargo, no todo está en nuestras manos, lo mejor, de acuerdo a diferentes experiencias que han transmitido personajes de la Seguridad, es crear esa cultura de seguridad desde casa.

“La seguridad siempre ha estado presente en mi vida. Somos una familia con muchos años de presencia en el sector, mi madre me ha trasladado el conocimiento de años con su toque de honestidad y sensibilidad, es decir hoy Multiproseg tiene combinación de un pasado familiar con un toque muy de ‘Brisa Espinosa’, un toque fino”, comentó Miguel Ángel Champo Espinosa.

Y precisamente la incursión de Miguel Champo Espinosa a la seguridad fue a través de su llegada como director general de Multiproseg hace unos años, poniendo en práctica todo lo que sus padres y su formación académica, le compartieron, no sólo sobre seguridad, sino también de administración de empresas.

“Mis padres me dieron la oportunidad y total confianza para dirigir la empresa; tengo una gran responsabilidad, pero con amor, y ellos a mi lado, todo se puede lograr, no hay límites”, expresó Champo Espinosa. Después de varios años al frente, no fue sencillo el establecer roles y funciones para cada miembro directivo de la empresa, sin embargo, ha ido avanzando exitosamente. “Siento que Multiproseg al mando de Miguel, mi hijo, es cada día más la empresa que siempre deseé”, explicó Brisa.

AMOR INCONDICIONAL

Cuando una madre ve por primera vez a su hijo, sabe que todo ese amor que se fue acumulando durante nueve meses, se prolongará para toda la vida, es el momento en que se entiende y se respeta aún más a su propia madre. “Mi mamá es honesta, responsable, y amorosa, no encuentro fallas en ella. Mucho de esas cualidades las heredó de mi abuela, ambas transmiten, transmitieron, un amor incondicional hacia mí”, platicó Miguel Ángel.

Por su parte, Brisa Espinosa sabe de la conexión que existía entre su mamá y su hijo, de ese amor que le transmitió y que de alguna manera lo sigue haciendo a través de ella. “Mi madre me enseñó a ser una persona honesta y sensible, a dar amor incondicional. Ellos tenían un vínculo muy especial y sé que le echa de menos todos los días, entonces trato de ser un poco como ella para que siempre encuentre en mí un lugar apacible y de escucha, sin juicios, pero sí con verdad”, comentó Brisa.

Una madre siempre ve perfectos a sus hijos, algunos la verdad es que sí lo son, otros sólo es cuestión de trabajar más algunas oportunidades, lo cierto es que cuando provienes de un núcleo familiar donde el amor, la confianza y la honestidad están presentes, será menos complicado enfrentarte a los retos de la vida.

“Miguel Ángel Jr. es, sobre todo, un hombre bueno, muy sensible, muy amoroso y desde pequeño muy consciente de su alrededor y de lo que le quiere, es muy maduro en muchas cosas, desde siempre, para su edad. Sumamente tenaz y muy inteligente, su capacidad de socializar y de ser empático es de admirarse. Quizá ahora por la etapa que está viviendo, podría ir un poco más lento, para poder comprender mejor el mundo en el que se desarrolla”.

MADRE PRIMERIZA

La maternidad es cambiante, a veces abrumadora, pero la mayoría del tiempo es totalmente un regalo de vida; nadie te dice lo difícil que va a ser, y a la vez no se puede describir la felicidad que se siente con el simple hecho de abrazar a tu hijo o hija; no hay un manual preciso, pero sí mucha experiencia en otras mujeres y mucho conocimiento en la vida diaria. “Si un consejo le puedo dar a una mujer que será mamá por primera vez, es que se prepare; la maternidad es la responsabilidad más grande y permanente que hay. Que lea, estudie y se rodee de personas y ambientes que signifiquen paz. Que esté preparada para darlo todo, pero, sobre todo, con amor incondicional”.

PARA MI MAMÁ

“Lo que más me gusta de mi mamá es estar con ella, así de simple. No encuentro ninguna falla en ella, la amo profundamente, y sólo ella y yo entendemos esa conexión que tenemos, somos idénticos, somos iguales y nos amamos incondicionalmente”, Miguel Ángel Champo Espinosa.