Violencia política empaña elecciones en Veracruz: 7 asesinatos y una desaparición
El proceso para renovar las 212 alcaldías del estado ha estado marcado por homicidios de candidatos, amenazas y la renuncia de aspirantes ante la falta de garantías de seguridad.
Veracruz.— El proceso electoral para renovar los 212 Ayuntamientos en Veracruz se desarrolla bajo un clima de violencia política que ya ha cobrado la vida de siete actores vinculados al ámbito electoral, entre ellos dos candidatos, además de una desaparición confirmada y múltiples amenazas a aspirantes locales.
Desde diciembre de 2024, diversas dirigencias partidistas, como las del PAN, el PT y Movimiento Ciudadano, han alertado sobre focos rojos en varias regiones del estado. MC incluso solicitó protección para 19 de sus aspirantes, de los cuales cinco renunciaron antes del arranque oficial de campañas.
Los hechos más graves
9 de diciembre de 2024. Es asesinado el diputado federal del PVEM Benito Aguas en Zongolica, a un mes de iniciado el proceso electoral.
8 de enero de 2025. Ejecutan al morenista Manuel Gamboa Soto, director de Gobernación del municipio Camerino Z. Mendoza, en Ixtaczoquitlán.
7 de febrero. Son hallados sin vida Carlos y Juan Daniel Neri Rodríguez, del Partido Verde. Carlos era secretario del Ayuntamiento de Paso del Macho.
Inicio de abril. PAN y PT advierten sobre zonas de alto riesgo en el norte y centro del estado. Movimiento Ciudadano reporta renuncias y amenazas, mientras Morena niega tener denuncias internas, pese a que su aspirante en Cosoleacaque, Elvia Merlín Castro, abandonó la contienda por falta de seguridad.
29 de abril. El día que inician oficialmente las campañas, es asesinado Germán Valencia, candidato de la coalición Morena-PVEM a la Alcaldía de Coxquihui.
6 de mayo. Mueren en ataques distintos los morenistas Bladimir García, director de Obras Públicas de Ixtaczoquitlán, y Martes Hernández Canuto, quien aspiraba a la candidatura en Oluta.
11 de mayo. La candidata de Morena-PVEM por Texistepec, Yesenia Lara, es asesinada junto a cuatro personas más tras un ataque armado durante una caravana proselitista. Recibieron al menos 20 disparos.
Falta de condiciones y silencio oficial
A pesar del creciente número de agresiones, algunos líderes partidistas, como el dirigente de Morena en Veracruz, Esteban Ramírez, han minimizado el riesgo y asegurado que no hay denuncias de sus militantes. Sin embargo, la salida de candidatos por miedo y la presión criminal evidencian lo contrario.
La violencia ha afectado todos los espectros partidistas, y la impunidad se mantiene como una constante, sin responsables detenidos por la mayoría de los asesinatos.
