Seguridad en América | Post

Cuando nos referimos a los retos de la seguridad privada, debemos considerar que las estrategias que está planteando el nuevo gobierno, no incluyen una gran cantidad de ilícitos que afectan directa y gravemente a la economía de las empresas, esto basándonos en que la incidencia delictiva está creciendo constantemente y de la inexistencia de un programa real de seguridad que permita determinar que las empresas van a ser menos afectadas.

El crecimiento de las actividades delictivas, así como las modalidades que nacen constantemente ponen en riesgo la seguridad de las personas y su patrimonio, ya sea a nivel comercial, empresarial e inclusive personal, y prácticamente la única instancia a quienes pueden recurrir para protegerse es a las empresas de seguridad privada.

La mayoría de los empresarios de esta actividad, siempre se han manifestado con el dicho de que cuentan con un alto grado de profesionalismo y de conocimientos, situación que en muchos casos es muy cuestionable, con base en esto, es precisamente en este momento que tienen que demostrarlo, ya no basta que una persona con actividades de seguridad privada, ofrezca un servicio, ahora se requiere que se le dé cierta garantía a quien lo contrata de que cuenta con los recursos tecnológicos, instrumentación operativa y conocimientos, que permitan salvaguardar los bienes y valores por los que son contratados.

En un artículo anterior que escribí, hice referencia a que prácticamente todos los empresarios de seguridad privada se manifiestan como “expertos en seguridad”, pero la realidad es que su expertiz es sólo hacer dinero, vendiendo servicios que distan mucho de ser eficientes, pero sí son lucrativos y bien remunerados. Por otra parte, están los empresarios que viven en la ilegalidad, dueños de empresas de seguridad que no cuentan con infraestructura, con conocimientos muy pobres o casi nulos, pero encontraron un medio de vida económico; también existen los verdaderos empresarios de seguridad que se esfuerzan por capacitarse, se adaptan a las nuevas tecnologías y desarrollos de nuestra época, la dificultad radicaría en saber quiénes son unos y quiénes son los otros.

¿CÓMO IDENTIFICARLOS?

El cómo poder identificarlos puede ser muy fácil, ya que, al contratar sus servicios, su equipamiento o su asesoría especializada, proporcionen a la vez una garantía de eficiencia y asuman una consecuencia si llega a ser vulnerada la seguridad propuesta que realizaron en la contratación.

Existe una gran diversidad de equipos, servicios y asesorías que ofertan los “expertos” de la seguridad privada, donde la diferencia radicará en la forma como asumen los riesgos de un servicio en caso de que no funcione, un equipo que no cumpla con un cometido o una asesoría fallida.

Hagamos un análisis de algunos de los servicios más comunes: la instalación de alarmas, donde siempre manifiestan al venderlas que son las mejores, que tienen múltiples formas de advertir la intrusión en el lugar donde se instalaron, pero al poco tiempo se detectan múltiples fallas, donde entraron a robar en el lugar instaladas y la alarma no se activó, que se presentaron falsas alarmas y alertan a los propietarios del lugar en forma falsa, que no se atiende el disparo de la alarma y no se contuvo el robo, simplemente por la mala calidad del equipo instalado (que en muchas ocasiones las anuncian como sin costo), pero si el contratante opta por cancelar el servicio, en ese momento le hacen saber que hay un contrato por determinados meses y que será penalizado con los meses restantes hasta que se culmine el contrato, además de que si no acepta continuar con el servicio o pagar las multas lo pueden demandar civilmente para obligarlo a pagar.

Esto mismo pasa con los sistemas de videovigilancia, cuando los que venden le manifiestan al comprador que es el mejor equipo y a un precio muy bajo, pero si se descompone o presentan fallas en la operación del sistema, le dicen que, como son de otro país, no hay refacciones o van a tardar mucho tiempo en arreglarlo hasta que lleguen las piezas que están fallando, cuando la realidad es que son equipos muy baratos que se venden a muy bajo precio, pero se ofertan como de última tecnología y una vez realizada la venta, el vendedor ya realizó un buen negocio y se despreocupa de si está conforme el cliente o se siente defraudado.

Los servicios de guardias intramuros no son la excepción, utilizan a personas muy mal capacitadas y con sólo cubrir el lugar asignado colocan a una persona sin experiencia y sólo va a estar parado fingiendo que es un guardia de seguridad, algunos empresarios cuando ofrecen el servicio, hacen creer al contratante que les van a poner personal de primer nivel y una vez que el empresario logra obtener el contrato del servicio, empiezan a volantear en las estaciones del metro o por periódico de circulación impresa, para cubrir las vacantes que necesitan utilizando personal que no cumple con un perfil y no tiene ni idea de lo que es el servicio que va a cubrir, buscando pagarles sueldos muy bajos para que generen grandes dividendos, por esto mismo, existe una gran rotación en el personal de guardias.

CUSTODIAS DE MERCANCÍAS

Referente a las custodias de mercancías, es donde existe probablemente una de las mayores irregularidades en el ofrecimiento de estos servicios, las empresas poco éticas, sólo contemplan un vehículo con dos personas a bordo, transitando detrás de un camión de carga, sabedores los que ofrecen este servicio que lo más probable es que los van a asaltar y que después de tres o cuatro asaltos les quitarán el servicio y en el peor de los casos no les pagan los servicios donde fueron asaltados, pero con conseguir otro cliente se dan por satisfechos.

No omito referir que al igual hay contratantes de estos servicios que buscan los precios más bajos, para sólo cumplir con un requerimiento que les solicitan las compañías de seguros y las empresas que van a requerir trasladar sus mercancías, sin considerar que lo más barato es lo más ineficiente y a la larga sale más caro, esta parte es la que ha generado que las empresas informales o irregulares encuentren un buen nicho de negocio.

Podría seguir enumerando todos los servicios, pero esto es sólo como muestreo de lo más contratado dentro de la seguridad privada y los posibles engaños en que pueden caer los contratantes, pero existen quienes los mismos servicios los ofrecen con gran calidad y eficiencia, sin embargo los contratantes deben de percibir que no nada más se les está vendiendo el servicio o el producto, hay que trasmitirles que un profesional de la seguridad buscará ofertar el mecanismo tecnológico o humano que resuelva sus necesidades, que perciba que existe una verdadera vocación de servicio, para que sólo gaste o invierta el cliente en lo requiere, salvaguardándole su inversión, siguiendo la fórmula de costo-beneficio.

Actualmente nos encontramos en un mundo altamente tecnificado, donde existen múltiples opciones para resolver problemas de seguridad, utilizando dispositivos especiales y más aún en la era de la “Inteligencia Artificial”, que permite bajar mucho los costos de protección y mejora en gran escala los resultados de eficiencia.

Imaginemos que un cliente solicita la contratación de 50 guardias para sus instalaciones y el profesional de la seguridad le recomienda sólo utilizar 25 guardias bien capacitados y además de la colocación de algunos dispositivos de apoyo para cumplir con su requerimiento y optimizar el nivel de seguri- dad, o imaginemos que a un cliente le ofrezcamos cámaras de videovigilancia con Inteligencia Artificial que puedan interactuar con otros dispositivos en forma autónoma, respondan ante una emergencia y puedan inclusive enfrentar a intrusos sin que se requiera la intervención del hombre.

Lo mismo se puede realizar con los sistemas de alarma, dotándolos de dispositivos de autodefensa, que no dependa a que acuda oportunamente la Policía o el contratante a defender su propiedad, contando con un sistema de autoprotección, lo que representaría una gran tranquilidad para quienes utilizan estos sistemas.

Las custodias de mercancías, desarrolladas hace 22 años por nuestra empresa, ya no cumplen los requerimientos de los clientes, esto se puede observar por el número creciente de asaltos, aun cuando llevan custodia de mercancías, cada día son más indefensos los custodios y más vulnerables, la delincuencia más agresiva y contundente, pero con un dispositivo de autodefensa donde el propio sistema de que está dotado el transporte, pueda enfrentar a los delincuentes en el momento de un asalto, inclusive bajándolos del vehículo que pretendían asaltar, en esa situación no importará si la autoridad reaccionó de inmediato, si el propio conductor se encuentra involucrado o si son delincuentes que operan sin el apoyo del chofer.

Aquí nace una pregunta: ¿Por qué hay empresas que tienen frecuentemente asaltos aun cuando son custodiados sus transportes y por qué hay empresas que nunca tienen asaltos en sus custodias de mercancías? Como es en nuestro caso, la respuesta es muy sencilla, por la tecnología que se utiliza y los protocolos de viaje que se diseñaron para cada empresa.

Todo lo manifestado en párrafos anteriores referente a tecnologías dotadas de Inteligencia Artificial ya existe, sólo se trata de profesionalizar y tecnificar los servicios de quienes son verdaderos profesionales y no comerciantes de servicios de seguridad, dejando pensar que un cliente debe ser un rehén que les genere grandes utilidades, bajo sistemas que de acuerdo a la criminalidad existente, se encuentran actualmente obsoletos.

Otra de las deficiencias de quienes ofertan y venden servicios, consisten en que cuando están realizando la negociación de adquisición, sólo se enfocan al negocio que están realizando y los dividendos que obtendrán, olvidando totalmente que el problema puede no ser de ataques de delincuentes exteriores, que es lo que van a tratar de contener con sus servicios, ¿pero qué pasa cuando los delincuentes son personal interno con conductas antisociales, que operan en la clandestinidad dentro de sus labores dentro de la empresa? Por obvias razones los sistemas o equipos instalados serán vulnerables todo el tiempo.

Ante esto el realizar una auditoría de comportamiento conductual, con análisis de comportamiento y redes de vínculos, donde se emita un dictamen de riesgo laboral, identificando a los trabajadores que están participando en los siniestros o ilícitos que se registran dentro de las instalaciones y en los recorridos de los traslados de las mercancías de los clientes, el resultado deberá ser concluyente y el salvaguardo de los valores y patrimonio estará garantizado.

ÉTICA Y HONESTIDAD

Para los empresarios de seguridad privada existe la opción de seguir vendiendo servicios y equipos que generen utilidades, aunque no resuelva los problemas de los contratantes, pero ante esto hagamos a un lado la palabra “profesionales de la seguridad” y sólo dejemos la de “comerciantes de servicios de seguridad”, considerando que siempre habrá personas que, por su ingenuidad o su alta necesidad, comprará o adquirirá lo que se le ofrezca.

Muchas empresas de seguridad privada invierten más dinero en publicidad y diseños de páginas web o comerciales en revistas, periódicos, o redes sociales, sin invertir en tecnología, esto se debe que es su mecanismo de venta y como le hacen creer a los requirentes de servicios de seguridad que su empresa es la mejor, buscan entrar por la falsa apreciación de una buena imagen y no de una buena empresa.

La ética y la honestidad son la base fundamental del profesionalismo, siempre irán de la mano, por lo que quienes utilizan un comportamiento no ético y son deshonestos, nunca deberían acreditarse el concepto de “profesionales”, la honestidad nace desde el momento en que se busca resolver los problemas de los contratantes y no nada más pensar en los beneficios económicos que puede dejar el vender lo que se les ofrece.

A través de los años se ha demostrado que no hemos podido unirnos para dignificar nuestra actividad en forma gremial, pero sí podemos luchar por dignificarla en forma individual, lamentablemente empresarios poco éticos, deshonestos y protagónicos luchan constantemente para apoderarse de este mercado, pensando más en sus beneficios económicos y su imagen que en las necesidades de quienes requieren estos servicios.

Probablemente algunos de los empresarios de seguridad privada podrían molestarse por el presente artículo, pero si son verdaderos profesionales no deben de inquietarlos estos comentarios ya que sólo debe afectar a quienes no cuentan con una ética profesional en sus actividades.