Seguridad en América | Post

¿EN PROTECCIÓN EJECUTIVA CUÁL DEBERÍA SER EL ENFOQUE EN LA IMPLEMENTACIÓN DE UN PLAN DE TRABAJO? 

No es gran novedad que para que salga lo mejor posible una acción debe venir de un buen plan o estrategia. Quisiera dar un enfoque distinto en esta ocasión y remontarme un poco más al origen de las acciones en las áreas de seguridad, me estoy refiriendo al protector como individuo.

El protector diariamente tiene asignadas distintas responsabilidades en su jornada de trabajo: son establecidos criterios, reglas, consignas, deberes y “planes” que determinan o dan guía en su quehacer diario. Aunado el profesionalismo y enfoque que cada protector tiene de experiencia previa debido a que su trabajo le demanda una atención y compromiso extra por el simple hecho de cuidar vidas.

Quiero resaltar a esos protectores la importancia de los planes y hasta dónde podemos abarcar en la vida por el sim- ple hecho de tener un rumbo claro. No podemos ir río abajo sin una dirección y sin control esperando que alguien nos salve, puede ser tarde, puedes chocar con una roca y hasta que te estás ahogando te das cuenta de que debiste tener otro enfoque o plan.

Lo mismo sucede en los servicios de protección, no es que un día rescindan el contrato por las circunstancias, más bien fue la suma de cosas sin atender lo que llevó al fracaso y todo por no llevar plan de servicio o algo peor, por no ser proactivo.

Un plan de protección requiere de información útil, valiosa, oportuna, precisa y novedosa que permita establecer mejores esquemas de protección del ejecutivo en lugares que habite, circule y visite. Previo a este análisis y establecimiento de actividades en un programa, debe de profesionalizarse el protector en aspectos de su persona dándole mejores herramientas para hacer el mejor trabajo posible.

¿Qué sucede cuando no cortas el pasto de tu jardín? Crece la maleza y llega un punto en que no te dejará abrir la puerta; y todo por no atender la poda de tu jardín. La suma de las no acciones lleva al fracaso y va en sentido contrario a las circunstancias de éxito.

Para lograr cualquier meta u objetivo debemos establecer un plan, éste deberá de ser por escrito y se deberá revisar continuamente. La diferencia del éxito en el trabajo será si realmente se actuó o sólo fueron buenas intenciones que jamás se atendieron.

¿QUÉ DEBEMOS CONSIDERAR PARA REALMENTE LOGRAR LAS METAS?

Para poder dar respuesta a esto se requiere tener un pensamiento crítico y dominio de tu persona, me refiero a cuestiones básicas de quién eres, cómo funciona tu cuerpo, tu mente y por qué algunas personas logran lo que se proponen y otras no. Me ha tomado algunos años invertir en el conocimiento de este tema, lo que me gustaría resaltar es que el ser humano puede lograr lo que se proponga, sólo es cuestión de mostrarle el camino.

Dicen que, si un día se lograra reunir todo el dinero de las 25 familias más adineradas del mundo y luego se repartieran entre todos los habitantes del mundo, este dinero regresaría de nuevo a esas 25 familias, todo porque ya saben el camino para lograrlo, saben que para lograr de nuevo ser millonarios deben tener un plan y “moverse”.

A continuación, mencionaré algunos puntos a considerar que integran una estrategia para la culminación de los objetivos que podamos tener dentro de nuestro plan:

1.- Lo primero es evaluar tu situación actual y dónde quieres estar en cinco o 10 años. Si quieres mejorar tu salud deberás tener un plan de salud, si quieres mejorar tu situación económica deberás tener un plan financiero. Si quieres mejorar en términos de tu trabajo y como protector deberás tener un plan de protección.

Ojalá tuviéramos un switch en el cuerpo que nos permitiera encenderlo para realizar las actividades que nos proponemos y que aun sabiendo que son necesarias para dar buenos resultados, a veces no las hacemos.

¿Cuál es el motivo que no permite avanzar? Cada ser humano es distinto debido a que está formado por su entorno, cultura, educación, etc. Lo destacable es que puedes mejorar y conocer otras formas de lograr tus objetivos, no permitas que la desidia y las excusas te paralicen.

La suma de pequeñas acciones acertadas es el camino hacia la mejora de resultados, esto me recuerda a que cada día podemos integrar hábitos que en la suma harán la diferencia.

2.-Integra en tu plan el hábito de llegar temprano al trabajo o de tener tu lugar de trabajo perfectamente aseado y ordenado. Con el tiempo podrás integrar nuevos hábitos y aunque no lo creas hay empresas como Alcoa, dedicada al procesamiento de aluminio en Estados Unidos, modificó los hábitos de la empresa y llegó a ser de las más exitosas y seguras en su ramo.

3.-Otros puntos a considerar es tener presente que para lograr algo diferente debemos hacer cosas diferentes. La acción es decisión, el moverse del lugar de confort, saber que se requiere entrega y algo más de esfuerzo. Las mejores fuerzas de élite en el mundo de la seguridad conocen muy bien que la diferencia de su trabajo es proporcional a su nivel en el entrenamiento.

4.-Esas fuerzas de élite elevan sus expectativas de los resultados en el entrenamiento ya que invierten gran cantidad de horas para ser los mejores, no se conforman con buenos, siempre buscarán ser los mejores. Están mentalmente preparados para dar siempre más de lo que le demanden. Se visualizan constantemente siendo perfectos y eso les permite mejores resultados, imaginan escenarios distintos, situaciones incómodas o de estrés. No te puedes conformar con menos.

5.-Para moverse o actuar debemos conocer cómo se interrelaciona el cuerpo con nuestra mente y cómo influyen nuestros pensamientos, emociones y creencias. Esto es básico debido a que requiere de un esfuerzo de cada uno para entender mejor cómo modificar y hacer surgir lo mejor de nosotros. Sabemos que somos seres con una comunicación celular por medio de reacciones bioquímicas y que pueden estar determinados por cosas tan sencillas como la alimentación, los pensamientos, los estados de salud, etc. Estados físicos y mentales óptimos te permitirán tomar mejores decisiones, si a ello le sumas cómo potencializar las formas de pensamiento para culminar tus objetivos, podrás implementar el plan que tu decidas desde el principio.

6.-Una de las mejores formas del cambio es fijarse en aquellos grandes líderes que pudieron lograr el cambio en sus vidas y adoptarlos como modelos a seguir. Puedes considerar tener varios modelos a seguir y eso tiene sus grandes ventajas ya que ellos primero tuvieron que investigar cómo lograr el éxito y fueron formando y moldeando sus acciones para el emprendimiento.

Seguro has oído hablar de algunos empresarios más representativos en México en el ramo de la seguridad privada que en sus inicios comenzaron como elementos operativos de la organización y que hoy son los presidentes del Consejo de sus organizaciones.

Aprende cómo trabajan, cuáles son sus creencias potenciales y cómo piensan, esto ahorra muchos pasos y tiempo en el camino. Cuando asistas a los cursos enfoca tus preguntas al éxito de sus programas y cómo fueron desarrollándolos.

Por último, te recomiendo en que todo plan que elabores lo lleves a cabo y te comprometas a cumplirlo. A la hora de desarrollar el plan estás involucrando acciones que requieren la decisión de hacerlas y deberás concretarlas cueste lo que te cueste. Este es el origen del cambio de cada persona, organización, grupo y sociedad.

Como verás estas pocas recomendaciones pueden ser de utilidad para conseguir resultados en tus planes de trabajo y no se queden a medio camino.

La protección ejecutiva debe ser un sistema de planeación y evitar en lo posible caer en la improvisación.