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Combata la Suplantación de Identidad a Través de Inteligencia Artificial

Uno de los mayores retos de seguridad a los que se enfrentan las entidades financieras, tras los asaltos a sus sucursales o a cuentahabiente, los robos a cajeros automáticos y la ciberdelincuencia, es la suplantación de identidad, delito que muestra incrementos del 40% anual.

El delito de suplantación de identidad provoca un daño de reputación para los bancos y un perjuicio económico muy grave para las víctimas. Para combatirlo a partir del 30 de marzo de 2020, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) exige a los bancos capturar la huella dactilar de los usuarios que aperturen una cuenta o un crédito.

Pese a esta medida de prevención, algunas entidades financieras ya están invirtiendo en los últimos avances tecnológicos para fortalecer la seguridad de sus oficinas bancarias y proteger los activos de sus clientes.

RECONOCIMIENTO FACIAL

La incorporación de Inteligencia Artificial en los sistemas de videovigilancia está suponiendo una revolución en el sector ya que evita un delito que, sólo durante el primer trimestre de 2019 ascendió a un total reclamado de casi 300 millones de pesos (1.5 millones de dólares) según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

El video inteligente permite reconocer y gestionar miles de rostros de forma centralizada, pero además genera otra serie de beneficios para la entidad.

Cuando un sospechoso entra en una sucursal, el sistema lo reconoce, envía una alarma al centro de control y activa el protocolo de actuación correspondiente de forma automática.

La gestión centralizada de cientos de miles de rostros, generados por los sistemas de reconocimiento facial, permite que la entidad sea capaz de reconocer a posibles delincuentes en el momento que acceden a sus oficinas bancarias y evitar sus actos ilícitos.

Además de prevenir el delito por suplantación de identidad, los sistemas de reconocimiento facial basados en video son capaces de recoger información relevante sobre la tipología de usuarios, clasificándolos anónimamente por género, edad, etc., e incluso detectan clientes VIP (Very Important Person) para brindarles una atención más personalizada. Los beneficios de esta tecnología son múltiples.

En la era de la Transformación Digital la videovigilancia jugará un papel fundamental para la resolución de problemáticas que no están ligadas a la seguridad: mejorar la experiencia de usuario, minimizar la operativa diaria y facilitar la toma de decisiones, entre otros.

Sólo aquellas entidades financieras a la vanguardia del desarrollo tecnológico serán capaces de afrontar y superar esta nueva etapa con éxito.