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COMUNICACIÓN ASERTIVA DEL LÍDER DE SEGURIDAD

Las organizaciones independientemente de cuál sea su orientación, requieren de líderes que sepan practicar una comunicación asertiva. Ante estos tiempos difíciles que aún atravesamos con la pandemia a nivel global, las organizaciones dependen de sus líderes para obtener el máximo potencial de su personal disponible, que en esta “nueva realidad” está en déficit. Citando al conferencista internacional, Adrián Cottin: “El liderazgo debe modelar las prácticas y conductas que alentarán el compartir la información, y más importante aún el compartir los pensamientos”.

En tal sentido, la información debe ser continua, clara y concisa. El líder debe transmitir confianza, con el evento global del COVID-19 no se puede ocultar información ni detalles en cuanto al cuidado de nuestra salud y sus afines. Ser líder es sinónimo de poder, y siempre tendrá seguidores a su alrededor, por lo tanto, está en la capacidad y en el deber de dirigir el personal de organización y guiarlos a un norte donde todos estemos obteniendo beneficios.

LA LEY DEL LÁTIGO

Ya hay resultados de estudios en donde hay evidencias que no podemos contar con “jefes”. La ley del “látigo” no es productiva en la actualidad. Y cuando hablo de la ley del “látigo” me refiero a que no podemos seguir dando instrucciones y/o órdenes al personal que está a nuestro cargo en “blanco y negro”, considero que debe existir un tiempo en donde el líder se aproxime al personal y le explique de manera concreta el “por qué” de las cosas.

Ante tanta incertidumbre que estamos viviendo todos los líderes, independientemente del nivel de comando, deben practicar y aplicar estrategias funcionales para la toma de decisiones desde la más rutinarias hasta las más complejas. Con máxima responsabilidad y moral los líderes deben ser ejemplos a seguir, ya sea que estén siendo observados o no, son quienes llevan y dirigen el personal que protege los activos de la organización.

En Latinoamérica, en líneas generales contamos con líderes en las distintas organizaciones capaces de dirigir y obtener su máximo potencial en todos los aspectos. El recurso humano tiene un talento infinito que si cuenta con un liderazgo efectivo y asertivo será productivo. En esta “nueva realidad” quien tuvo la visión de futuro para prepararse académicamente es con mucha probabilidad quien será el ganador (en sus propias circunstancias) después que pase todo el evento de la pandemia.

Como el líder está visualizando y evaluando constantemente, debe saber premiar y recompensar a quien merezca tal acción, motivado a que no todo se reduce a las necesidades socio-económicas. El personal también influye en el reconocimiento que obtenga.