Seguridad en América | Post

Cuando se habla de seguridad lo primero que se le viene a la mente a las personas y a quienes estamos en esta industria, es que es necesario un ejército de guardias que resguarde los espacios y bienes, una especie de statu quo arraigado, en donde se ha vuelto un reto entender que el mundo ha cambiado y el papel que juegan nuevas herramientas como la tecnología es fundamental para las empresas y trastoca hasta la generación de valor.

    Estamos en una era digital de big data e Internet de las cosas donde la tecnología es un catalizador que marcará el crecimiento y la forma en la que hoy se entiende la protección, además con los cambios ocasionados por la pandemia del COVID-19 y los aprendizajes; ese concepto se ha ampliado en el pensamiento colectivo y hay cabida para un concepto clave y fundamental en la seguridad: la salud.

INTEGRA

Queremos cambiar la mentalidad de los gerentes de Seguridad. Muchos tienen una experiencia considerable, el desafío es demostrar que puede tener un modelo que brinde alta confiabilidad sin reducir el nivel de seguridad. La tecnología es mucho más barata y puede llegar a ser más eficiente que tener un ejército de trabajadores, lo que ayuda a las empresas a reducir los costos.

    A esta visión la llamamos Integra y esa es la propuesta para el mercado mexicano. El objetivo es que Integra lleve a las empresas a otro nivel de seguridad integral y más sofisticado. En este contexto, Latinoamérica es un mercado clave para el sector de la seguridad y en nuestro caso particular estimamos que el crecimiento en los siguientes años se duplicará, alcanzando tasas de hasta 40 por ciento, lo que originará que nuestra apuesta se potencialice en la región.

    El crecimiento geográfico y de verticales que pasa por segmentos del sector retail, industrial y sector automotriz vemos serán los principales catalizadores.

    El reto al que las empresas se enfrentan en la actualidad sea cual sea su giro y sector es el de brindar a sus clientes, colaboradores, proveedores y aliados, la confianza de que se encuentran en un lugar seguro, englobando todos los aspectos.

    Las empresas de seguridad necesitan generar un enfoque más productivo en el que se requiere digitalizar la información y automatizar los procesos, buscando encontrar la combinación óptima entre la tecnología y el factor humano.

    Por ejemplo, un minuto de producción en una planta de fabricación cuesta muchos millones de pesos a las empresas y éstas tradicionalmente creen que necesitan una gran fuerza laboral para mantener la eficiencia. Introduciendo tecnologías sin contacto, la biometría verifica que la persona es quien dice ser y que está accediendo a la planta.

    Hemos ayudado a uno de esos clientes a ahorrar 50 millones de pesos al año. Es un sistema integral que ahorra costos y, por lo tanto, va más allá de mitigar los robos. Las empresas están interesadas en soluciones que ayuden a sus negocios y nosotros hemos implementado soluciones tecnológicas para obtener información que ayude a los clientes a ser más rentables y generar valor.

    Con este ejemplo, queremos romper el statu quo que hay sobre la seguridad y comunicar las distintas formas en que la seguridad ha cambiado al paso de los años enfocándose cada vez más en tecnología avanzada. La seguridad está en evolución y queremos ser parte de la nueva era.